Sin salud mental no hay salud laboral

Los problemas relacionados con la calidad del empleo representan la séptima preocupación de los españoles, según las cifras del último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). Prácticamente el 14% de la población así lo considera, a pesar de las medidas legislativas de los últimos años, que han mejorado el salario mínimo interprofesional, las bajas por maternidad y paternidad o han reconocido el derecho a la desconexión digital, entre otros aspectos. 

Existe un malestar, una incomodidad latente que un estudio conjunto de UGT País Valencià (UGT PV) con la Universitat de València (UV) puso de manifiesto el año pasado, al analizar la salud mental y la prevención de riesgos laborales. Entre el 17% y el 27% de personas sufre ansiedad en el trabajo; entre el 30% y el 38% dice experimentar estrés siempre o casi siempre, y un 47% reconoce encontrarse expuesta a factores de riesgo para su bienestar mental en su lugar de trabajo. 

Salud mental, salud laboral

Si bien los datos sobre accidentalidad laboral de principios de este año -en los que la Comunitat Valenciana ocupa la tercera posición- disminuyen respecto de enero de 2024, el Ministerio de Trabajo no recoge las contingencias derivadas de trastornos y patologías mentales. El bienestar y la salud psicológica y psiquiátrica escapan de sus estadísticas sobre dolencias profesionales, a pesar de que los casos de mala salud mental se podrían reducir entre un 60% y un 80% con regulación de ritmos laborales, reducción de la precariedad laboral y mejora de las relaciones sociales, según el análisis de UGT PV y la UV. 

En España, las personas trabajadoras en riesgo de padecer un trastorno psicológico crecieron 41 puntos porcentuales entre 2005 y 2021 -del 14,9% al 55,9%-, una situación que algunos autores describen como una nueva pandemia de salud mental. Este aumento no solo afecta directamente a los empleados, sino que también tiene un impacto significativo en las empresas: mayores índices de absentismo, rotación laboral y costes operativos, así como pérdida de productividad de los equipos de trabajo. De hecho, se calcula que el coste anual de estas bajas es de 339 millones de euros.

El 15% de los días de baja en 2021 se debieron a trastornos de salud mental y del comportamiento, advierte el estudio. Pero la salud mental se considera una enfermedad común y no un accidente de trabajo, una consideración que el informe reivindica.  

“Según el Ministerio de Sanidad, el coste de la depresión en nuestro país supera los 6.000 millones de euros, y las pérdidas de productividad por bajas laborales y prematuras representan el 67%”, manifestó Marisa Baena, vicesecretaria general y de Salud Laboral, Medio Ambiente y Cooperación de UGT PV, en la presentación del estudio. “Creemos que, con un enfoque adecuado, los riesgos psicosociales y sus daños pueden prevenirse y gestionarse de modo satisfactorio”, añadió. “La legislación actual obliga a las empresas a cuidar la salud mental de sus trabajadores sin embargo, por razones culturales e históricas, esta obligación les era poco exigida”, alegó Adrián Todolí, profesor de Derecho en el Trabajo de la UV.

La presentación de este estudio se realizará en la sede de UGT-PV en Valencia el viernes 16 de mayo, en formato presencial y en streaming, planteando como principal herramienta de mejora la implementación de planes de salud mental en las empresas y administraciones públicas.

Otras patologías derivadas del trabajo

Aunque en 100 años la tecnología ha mejorado la forma en que hoy en día trabajamos, seguimos dedicando ocho horas al día al empleo. Es más: en parte, el auge de las nuevas tecnologías ha incrementado los tiempos de trabajo, al hacer un uso inadecuado de los dispositivos digitales. Una situación que se traduce en daños a la salud a causa de la falta de desconexión, pese a que existe una regulación al respecto.

Las malas condiciones laborales también influyen en el aumento de casos de adiciones, observa UGT PV. Según la Encuesta sobre Alcohol y otras Drogas en España 2019-2020, existe un consumo mayor de estas sustancias en los puestos de trabajo con condiciones más desfavorables. Ante esta relación, el sindicato ha elaborado un protocolo de prevención y acompañamiento en materia de adicciones con y sin sustancia para implementarlo en las empresas.

Con la conmemoración del Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo -28 de abril- como marco, UGT PV también recuerda que tras una situación de incapacidad temporal la mayoría de personas trabajadoras no se incorpora al trabajo con el 100% de sus facultades. Su adaptación es paulatina, ya que las patologías de media y larga duración, donde suelen encuadrarse las dolencias mentales, suponen una dificultad mayor. En este sentido, la organización sindical propone modificar el marco normativo que regula la incapacidad temporal introduciendo mecanismos que faciliten la incorporación gradual y progresiva al puesto de trabajo para un retorno seguro y saludable.

En esta dirección y fruto del trabajo conjunto de UGT PV y el Grupo de Investigación SALUD-O de la Universidad Miguel Hernández se van a realizar el jueves 22 de mayo en la Sala de Juntas del Edificio Valona en la UMH de Elche las V Jornadas de Retorno al Trabajo Efectivo y Saludable tras una Baja por Incapacidad Temporal, con el objetivo de plantear protocolos de retorno al trabajo y tratar la reciente reforma aprobada en el Senado el pasado 22 de abril que elimina el despido automático por incapacidad permanente.