El pez guitarra, que habita en Cádiz o Huelva, está en peligro de extinción y esta es la iniciativa para salvarlo

El Glaucostegus cemiculus, también conocido como pez guitarra o guitarrón, es una de esas especies que habita en nuestros mares pero que, por diferentes causas, se encuentra en peligro de extinción.
Es una especie de raya cartilaginosa emparentada con los tiburones. Y en las provincias de Cádiz o Huelva era bastante habitual verla. Pero varias entidades se han puesto manos a la obra para que precisamente no dejemos de contemplarla por el Atlántico.
En concreto son la Fundación Oceanogràfic, la Fundación Azul Marino, el Acuario de Sevilla y la Associació Lamna las que coordinan, junto a otras entidades, el Proyecto Glaucostegus, iniciativa tomada después de que se observase que se trataba de un animal cada vez más escaso.
Las causas de dicho peligro de extinción, que han hecho que se reduzca el número de ejemplares de pez guitarra no solo en el sur de España sino en gran parte del litoral europeo, la pesca incidental, la pérdida de hábitat y la presión humana.
Al frente del Proyecto Glaucostegus está el doctor Jaime Penadés, que busca generar conocimiento científico sobre la biología, ecología y amenazas del guitarrón en su hábitat. “Obtener información sobre el estado de esta especie en la costa andaluza, su reproducción, uso de hábitat y amenazas, para tratar de mejorar su protección a nivel nacional y también mundial”, asegura el responsable del proyecto.
La ayuda de los pescadores
Al Proyecto Glaucostegus se han unido también los propios pescadores recreativos de la zona, cuya participación es parte fundamental de la iniciativa porque son quienes pueden avistar mejor y de manera más frecuente la presencia del pez guitarra en aguas andaluzas. Si aportan foto o vídeo junto a datos como fecha, hora, lugar o tipo de cebo, podrán confirmar la reproducción en la zona o detectar casos de furtivismo.
En paralelo a dicha colaboración, las muestras científicas proporcionan información sobre la especie en peligro (tamaño, sexo, ADN) para, a partir de ahí, comparar la genética con ejemplares de las colecciones zoológicas de cuatro de los principales acuarios de la península ibérica y valorar la viabilidad de un plan de reproducción ex situ de la especie, con vistas a una posible reintroducción futura en zonas consideradas seguras.
0