Francisco de Rojas, Shakespeare y Calderón de la Barca: el Teatro Clásico de Olmedo se celebrará del 18 al 27 de julio

El poder en sus sombras, el destino y la identidad en crisis, y el puente entre el siglo de oro español y el teatro isabelino inglés son los hilos argumentales de la programación de la 19ª edición del festival “Olmedo Clásico”, que tendrá lugar del 18 al 27 de julio en esta localidad vallisoletana.
Un certamen que, en palabras del consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Gonzalo Santonja, “tiene el futuro garantizado, puesto que se ocupa del gran pasado del teatro del siglo de oro que es presente, porque sus obras y autores son intemporales”.
Así lo ha asegurado durante la presentación de un Olmedo Clásico que “tiene contundencia, peso y solidez” y que, desde que comenzó en 2006, ha ofrecido más de 220 espectáculos y reunido a más de 120.000 espectadores, con una media de 7.000 cada año “que siempre crece”.
“La cultura es de todos, y no cabe disección ni debate ideológico, porque este tipo de iniciativas sirven para superar momentos ásperos con esa cohesión social que fomenta”, ha añadido Santonja, quien ha recordado que el festival ofrecerá 13 piezas clásicas, entre las que destacan, una vez más, Pedro Calderón de la Barca y William Shakespeare.
La Compañía Nacional de Teatro de México abrirá el festival, el 18 de julio, con la comedia de Sor Juana Inés de la Cruz Los empeños de una casa, mientras que el sábado subirá al escenario de la Corrala del Palacio del Caballero de Olmedo la compañía de Teatro Clásico de Sevilla, con Macbeth, de Shakespeare.
El dramaturgo inglés volverá a ser protagonista el 22 de julio, con Rei Lear, a cargo de los portugueses Companhia do Chapitô y el 26, con la tragedia Coroliano, de la mano de la compañía Eqm Serveis Culturals.
El domingo 20, Morboria Teatro representará la comedia Lo que son mujeres, de Francisco de Rojas Zorrilla; el 21, Pepe Viyuela protagonizará “Guitón Onofre. El pícaro perdido”, en una adaptación de la novela de Gregorio González y, el 23 se podrá ver La dama duende, de Pedro Calderón de la Barca, a cargo de Mic Producciones.
El día 24 volverá a subirse a las tablas Calderón, con El teatro del mundo, recreado teatral y musicalmente por For the Fun of It, a la que sucederá, al día siguiente, Farra, una celebración barroca de teatro, poesía y música y, para cerrar el festival, Ron Lalá ofrecerá el espectáculo “La desconquista”, el domingo 27.
Asimismo, el Centro de Artes Escénicas San Pedro, acogerá el recital Momentos inolvidables de los grandes intérpretes del clásico, con Fernando Aguado, Beatriz Argüello, Pepa Pedroche y Clara Sanchís, el día 21, y El arte de ser comediante, con Laura Garmo y Nacho León, el 22.
También Calderón será protagonista en este espacio, con El alcalde de Zalamea en sus versos esenciales, un recital dirigido por Emilio de Miguel e interpretado por Arturo Querejeta, Blanca Izquierdo, Javier Bermejo, Joaquín Notario y Ernesto Arias, el 23 de julio.
Estos tres espectáculos se encuadran en las “Jornadas sobre teatro clásico” que, este año, bajo el lema “Clásicos en carne y hueso: los comediantes de ayer y hoy”, llevarán a los clásicos al público desde las claves de su tiempo, analizando su vigencia actual y estimulando su conocimiento.
Germán Vega, catedrático de la Universidad de Valladolid, volverá a llevar la batuta de estas jornadas, en las que se darán cita profesionales de los diversos sectores vinculados al mundo del teatro y que quieren abrirse más al público, puesto que están dirigidas a estudiantes, profesores e investigadores.
A todo esto se añade el curso de interpretación actoral 'Fernando Urdiales' que en esta edición se centrará en “Las otras gracias de Feliciana Enríquez”, con una versión libre de Las tres gracias mohosas, que permitirá viajar desde lo más culto a lo más vulgar, en clave de comedia, pero sin perder ni un ápice de conflicto dramático.
Benjamín Sevilla vuelve a ser el responsable de la programación de “Olmedo Clásico”, que vuelve a mezclar autores, géneros, épocas y territorios, así como compañías y dramaturgias, para hacer del festival un referente nacional, un ejemplo de dinamismo cultural y económico, que genera cohesión, cultura, conocimiento y vida.
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